
William Wilberforce fue, además de un filántropo apasionado que impulsó numerosas acciones benéficas, el líder indiscutido de una lucha imprescindible del siglo XVIII. Como creador del movimiento abolicionista en Gran Bretaña, su exitosa gestión le ha granjeado un destacado lugar en los anales de la historia. Hoy, es símbolo de las gesta para abolir la trata de esclavos y la esclavitud en los dominios de todo el Imperio Británico
Los tiempos que desató la Revolución Industrial, marcaron a fuego a las mujeres y niños de Inglaterra. Su trabajo, pronto se volvió imprescindible para hacer girar la maquinaria feroz e insaciable que en el siglo XVIII, se encendía en las fábricas de Gran Bretaña. Parteaguas indudable de la historia e impulsora de los sueños de la Humanidad de verse en camino de un progreso indefinido, el lado más oscuro de la revolución, aún permanece oculto, en las sombras. Los registros que llegan de esos días, tienen como protagonistas a las luchas de personas como William Willbeforce, un hombre valiente que se animó a luchar para cambiar las cosas.
En el condado de Yorkshire, donde desemboca con parsimonia el río Hull, por la costa norte de Inglaterra, se ubica la pintoresca ciudad de Hull. Allí, un 24 de agosto de 1759, venía al mundo en el seno de una familia rica William Wilberforce. Un muchacho de inteligencia aguda que, antes de alcanzar la edad madura, aquella que llega cuando los golpes de la vida abren los ojos al dolor del mundo, llevó una vida de dandy. Sin culpas, disfrutó de todo cuanto de goce le ofrecía su estatus social y sus posibilidades económicas: viajes por el mundo y una tupida vida nocturna, cargada de tertulias, tragos , humo y vicios.
Su único atino por aquellos días, fue cumplir con honores su currícula en la Universidad de Cambridge donde se graduó, y también entabló una amistad que perduraría en el tiempo y le daría la clave de su vida y su futuro: la lucha por abolir la esclavitud y el trabajo infantil destado por la Revolución Industrial. En las aulas de Cambridge, se topó con quien sería el futuro primer ministro de Inglaterra, William Pitt el Joven, quien lo entusiasmó para entrar en la carrera política . Pronto, en 1780, Wilberforce ya entraba con toda la decisión y el arrojo al ruedo político. Primero, lo hizo como representante de su ciudad natal, Hull, y luego, representando al condado de Yorkshire en las arena del Parlamento.
Un legado imprescindible que perdura
Mientras Wilbeforce llevaba adelante su tarea como legislador, la vida le puso enfrente la tragedia de su tiempo y decidió luchar para cambiar las cosas. Hombre de mundo, acostumbrado a una sociedad arraigada y legitimada en el esclavismo, la situación dio un vuelco radical en su interior al ver las vidas truncas de tantas mujeres y niños que cumplían jornadas laborales de 14 horas , siete días a la semana. Desde entonces, no dio tregua hasta conseguir la reforma social en pos de mejores condiciones laborales en la Gran Bretaña de aquellos días.
La acción de William Willbeforce abarcó diferentes aristas y problemáticas de la sociedad de su tiempo. Su lucha y sus batallas se desarrollaron tanto en el campo de acción de lo cotidiano como en las arenas tumultuosas del Parlamento. Peleas en las que debió enfrentarse a los intereses más fuertes y arraigados de su tiempo, pero sabía que en su país, gran parte de la sociedad, también consciente de lo que sucedía en las fábricas lo apoyaría. Entre los hitos de su legado se cuenta:
*La abolición definitiva de la trata de esclavos: A esta loable causa le dio todo su tiempo, su energía y esfuerzos. A lo largo de los años presentó sucesivamente numerosos proyectos de ley en el recinto parlamentario . Además, movilizó contactos e influencias para despertar conciencia entre la gente de su tiempo . Sostenía que esto era una tarea imprescindible y un bastión a conquistar en el camino para la pronta abolición de la esclavitud.
* Fundación de la Compañía de Sierra Leona: Con sus fondos, creó esta colonia en África, donde eran llevados los esclavos libertos.
*Fundación de la Sociedad Bíblica: al adoptar la religión protestante, con sus fondos hizo posible la traducción y envío de numerosos ejemplares de La Biblia a sitios remotos de Inglaterra.
* Fundador de la Sociedad Real para la Prevención de la Crueldad Animal: Fue uno de sus fundadores y gracias a sus donativos, se llevaron adelante tareas de rescate, tránsito y programas de adopción de animales que sufrieron maltrato. Una tarea que llevada adelante de forma organizada, logró solucionar el flagelo de los animales que eran abandonados y luego sacrificados en las dependencias municipales . Una iniciativa que también llevó alegría a muchas familias gracias a la incorporación de una nueva mascota.